Misión:Lluvias y akumas en Venecia-Natilyn y Ggio Vega

Unos días después, tras un viaje arduo y sin descanso alguno,llegaron a Venecia. Era noche cerrada, y los hermosos edificios y los canales de los que tanto habían oído hablar apenas eran sombras difuminadas por la oscuridad y el agua. Como ya les habían dicho, llovía torrencialmente, y el uniforme de exorcista de Natilyn, que lucía por primer vez, estaba empapado. Constaba de una chaqueta corta negra, con capucha (que llevaba puesta,aunque no servía de mucho) con adornos en blanco y el símbolo de la congregación,combinado con unos pantalones negros y unas cómodas botas de cuero hasta la rodilla. El frío le inundaba hasta el tuétano de los huesos,pero se sobrepuso. Su compañero, Ggio Vega, estaba a su lado,y no parecía tener frío. Habían hablado muy poco durante el viaje, no más de lo necesario. Tampoco es que ella fuera muy conversadora,y se veía que él tampoco lo era. Cada vez llovía más fuerte, y la verdad es que le apetecía poder descansar una noche, dormir en algún hotel, sin preocupaciones. Ni siquiera habían cenado, pero no le importaba. Porque tenían una misión, descubrir si era cierto que había una inocencia, y no podían dejarlo todo solo por estar un poco cansados. Además, la guadaña de Natilyn, que llevaba colgada a la espalda, estaba pidiendo víctimas. Quería cortar akumas, y ella no sería quien se lo negase. Se le escapó una sonrisa algo espeluznante al pensar en la sensación de matar akumas, que tanto le agradaba. Aún así, le preguntó a su compañeros
Natilyn-Bueno ¿Qué hacemos?

Ggio Vega había partido junto con su compañera hacia Venecia. La cerrada noche refrescaba cuando ambos llegaron en el Ferry. Ggio vestía un uniforme color negro con rebordes plateados, que en su caso está personalizado al incluir una chaqueta de estilo mandarín ligeramente abierta en la zona del pecho y arremangada hasta los codos. No lleva un cinturón negro, mientras que sus hakama se asemejan más a unos pantalones de tela amplios, acordes con la influencia china que reviste la apariencia de Ggio. Su calzado también parece estar ideado para las artes marciales. Asimismo llevaba un mapa, su maleta, varios folletos guía y un paraguas para no mojarse. Algo parecido a una calavera de Tigre Dientes de Sable se hallaba sobre su cabeza a modo de casco, quedando los afilados colmillos blancos marcando el rostro de Ggio, era su arma antiakuma, de Tipo Parásito. Observando, la gente iba en vaivén de aquí para allá, todos con chubasquero o paraguas, y aunque hubiese estado dos años conociendo el mundo actual, aún no se había acostumbrado del todo.

Abrió entonces su paraguas para proteger a ambos de las eternas lluvias en tanto escuchaba las palabras de su compañera, Natilyn, aunque no sabía su nombre. Fue entonces cuando separó sus finos labios, observándola con sus característicos ojos amarillentos.
GGIO VEGA:- Deberíamos comenzar a investigar el caso. Por cierto, soy Ggio Vega.. - Se presentó el chico- ¿Y tú eres?

Le escuchó, agradecida por que la cubriera de la lluvia, que ya empezaba a cansarla, a pesar de que acababan de llegar. Con las prisas por empezar la misión, ni siquiera se habían presentado, calló en la cuenta. Se cruzó de brazos y le dijo, algo esquiva
Natilyn:-Yo me llamo Natilyn Shuffer, pero con que me llames Natilyn es suficiente.-se quitó la capucha, y en un gesto rápido y ágil, se escurrió el corto cabello, que estaba calado de agua. Después, volvió a cubrirse-Empecemos, pues. Deberíamos acercarnos al gran canal.

Avanzaron por las calles, con los folletos lograron no perderse. La gente se paraba a observarles, algo asustada, pues un chico de ojos amarillos con una calavera de tigre dientes de sable como casco y una chica con una guadaña colgada a la espalda no era una estampa muy acogedora. Algunos se calmaban al ver el símbolo de la congregación. Natilyn iba pendiente de toda la gente que pasaba, pues cualquiera de ellos podría ser un akuma. Andaba calmada, pero con una postura que indicaba que estaba dispuesta a atacar de un momento a otro. Al final, subieron a una góndola. Un hombre de unos 50 años se ofreció a acercarles al gran canal por un módico precio, y ellos aceptaron. Natilyn se sentó en la góndola. Seguía preparada para la aparición de un akuma. En realidad,estaba deseando empezar a luchar.

Ggio estuvo de acuerdo con su compañera, y. con ella, se había montado con su compañera en la góndola, siendo llevados por un hombre de mediana edad, aunque el chico estaba en alerta tanto como su compañera, pues cualquiera podría ser un estúpido Akuma. Notaba las ansias de Natilyn de luchar y lo comprendía. Él asimsimo, notaba esa sencación, esas ansias de pelea para no verse tan oxidado.

Pero el momento finalmente llegó: el a,biente se intensificó más, bajó la presión atmosfñerica, como si a los civiles les faltase algo.
GGIO VEGA:- ¡Por fin llegó el momento! Inosensu...hatsudou... - Bramó. No se produce ningún cambio en Tigre Estoque, el arma antiakuma parasitaria de Ggio, que reside en su máscara y que puede ser transmitida a sus músculos, huesos y sistema circulatorio, aunque deja algunas ténues muestras color verde pálido en la máscara de dienets de sable. Presenta unas sorprendentes habilidades de lucha cuerpo a cuerpo, llegando a rivalizar con la que es considerada una de las mejores en esta disciplina.

Ella también los sintió. Había akumas muy cerca,y los descubrirían pronto. La góndola se balanceaba a un lado y al otro, parecía que pronto cedería ante el agua y la lluvia enfurecida. Aún así, el hombre que los acompañaba parecía muy tranquilo. Natilyn se levantó con algo de dificultad,casi cayó al agua pero en el último momento recuperó el equilibrio. Se avergonzó un poco,porque su compañero creería que era muy torpe,lo que en realidad no era cierto. Desenvainó su guadaña. Era grande,y el mango estaba cubierto de delicadas filigranas de plata. La hoja era flexible y un brillo amenazador indicaba que estaba muy afilada. A pesar de su apariencia,pesaba muy poco. Activó su inocencia. Apenas se notó,pero el brillo adquirió más intensidad. El barquero estaba asustado ahora. Y aún más cuando varios akuma de nivel 1 aparecieron volando por encima del tejado de una casa. Era un grupo numeroso.
Natilyn:-Detenga el barco-dijo muy brusca. El hombre lo tomó como una amenaza,así de obedeció. Esa vez no perdió el equilibrio cuando la góndola se tambaleó. Los akuma se acercaron rápido. Sonrió de una forma que pondría los pelos de punta a cualquiera. Inútiles akuma sin cerebro. Los odiaba y despreciaba a partes iguales. Ggio también había activado su inocencia,así que ambos estaban listos para luchar. Sin ponerse de acuerdo,ambos saltaron a la vez y se abalanzaron contra sus enemigos. Natilyn no pudo evitar reírse cuando el primero de los akuma calló fácilmente,cortado por su guadaña.