*En el bosque*// Ace y Nelliel

Aquella primera tarde en la que ella y Ace se habían vuelto Exorcistas de la Orden Negra, Rama Europea. La aristócrata pelilarga, caminaba por uno de los claros del bosque, cuyo pasto murmuraba agitándose bajo los calzados pies de la mujer, cuya katana ordinaria, con la saya y tsuka fucsias y la tuba o guardia poseía la forma de dos lunas en cuarto creciente enfrentadas entre sí y abajo de las mismas había una figura en forma de flor de cerezo de igual metal. El viento le acariciaba las pálidas mejillas y le ondeaba el largo cabello de la aristócrata, que sentía aquéllo como una agradable caricia. Uno de los altos árboles del claro dejó caer, en la siniestra cubierta por un negro guante de cuero, una hoja algo ovalada, con los bordes ondeantes y salientes: era de olmo, una especie muy común en la flora inglesa de Inglaterra.

NELLIEL TU ODELSCHWACK:- Es de olmo común.- musitó la chica con una agradable y dulce sonrisita al observar la hoja. Al menos pensaba que no estaba sola, pue ssiempre era acompañada de su compañero de juegos y muy amigo de la infancia, cuya presencia sentía aunque algo lejos.

Ace buscaba a Nelliel, la habia perdido de vista cuando unos exorcistas le rodearon pidiendole que aceptara su traje de exorcista, a lo que se negaba rotundamente. El preferia su ropa comun de siempre, si a unos simples pantalones y un gorro se les podia llamar ropa.
Intento bucarla en su habitacion, la cual le costo encontrar.. aquello parecia los tuneles de las hormigas: Todos los pasillos iguales y personas que iban de aqui para alla sin tiempo para poder ayudarle. Despues de un tiempo llego a la habitacion, nadie. Despues de todo no estaba. Vio mas alla unos buscadores cerca de las habitaciones que le indicaron ver a la nueva por la zona del bosque.
Ace salio en su busca, desde que habian llegado alli no habia tenido tiemo de hablar con ella y aquel era un momento muy importante.
Pudo ver, a lo lejos, la sombra de una mujer de largos cabellos y supo enseguida que era Nelliel. Llevaba tiepo junto a ella, podria reconocerla entre un millon.

-¡Nelliel! Al fin te encuentro, eres dificil de encontrar. - Llego a su lado y agachandose pudo las manos en sus rodillas para poder tomar aire. Al poco se incorporo. Habia sudado un poco de tanto correr y a causa de eso tenia un poco de rojete en la cara, siempre le pasaba cuando corria.

-¿Que haces en este lugar tan apartado?

Escuchó una voz a lo lejos, la cual reconoció como la de Ace, su amigo de la infancia. Parecía que llevaba buscándola y corriendo.

¡Nelliel! Al fin te encuentro, eres dificil de encontrar. - Llego a su lado y agachandose pudo las manos en sus rodillas para poder tomar aire. Al poco se incorporo. Habia sudado un poco de tanto correr y a causa de eso tenia un poco de rojete en la cara, siempre le pasaba cuando corria.-¿Que haces en este lugar tan apartado?

Esperó pacientemente a que Ace recobrara el aliento, podía ver su cara medio rojiza de tanto correr, de modo que dirigió su mirada tranquila y sosegada de ojos pardo-grisáceos a los negros de su amigo.

NELLIEL TU ODELSCHWACK:- Necesitaba pensar un poco.- le respondió calmada y tranquilamente.- Deberían dejarte pasar pese a la ropa que llevases.-añadió, aunque un instante después volviéndose un poco más seria con el que era su amigo de la infancia, quien anteriormente tenía miedo a mostrarle sus poderes a Nelliel, por miedo que le rechazara. Pero no, era al contrario. Ella lo aceptaría tal como era, con o sin poderes-.. Pero,.. esa ropa es obligatoria. Con el traje se nos reconoce como Exorcistas, así los Akuma nos atacan a nosotros y no atacan a gente inocente, aunque sea una desagradable sensación el atraer las miradas de las demás personas ajenas a nosotros.

Estaba en un aprieto, Neilliel tambien pensaba que era necesario que el llevase aquel uniforme. Era cierto que servia para atraer a los Akuma, pero el era un rebelde desde muy niño, nunca aceptaria una orden si a el no le convenia.

-Lo se perfectamente Nelli, pero el uniforme que me quieren hacer llevar - Se arrasco la cabeza como pensativo - Es muy.. formal. No es lo mio, al parecer sucedio lo mismo con mi abuelo. - Sonrio - Soy tan cabezota como el.

Hacia un poco de viento, aunque era una brisa fresca y agradable. Muy de vez en cuando caia una nueva hoja del arbol que era mecida por el viento hasta terminar rodando por la superficie en tierra firme.
Ace miro al cielo preocupado y no pudo evitar preguntar sinceramente.

-¿Crees que hicimos bien en venir aqui? - Suspiro y volvio a tomar aire cerrando los ojos agotados - Viniendo hasta aqui asumimos que podemos ser atacados por las indeseables maquinas denominadas Akuma. Corremos el riesgo de morir. - La miro fijamente - Corres el riesgo de perder la vida.

Tener aquel sentimiento era bastante inhumano, el habia nacido para ayudar a los humanos que eran convertidos en aquellas cosas, pero el tambien era un humano y sentia, por poco que fuese, una pequeña mecha de miedo en su interior. No soportaria perder seres queridos ante su impotencia.

Lo se perfectamente Nelli, pero el uniforme que me quieren hacer llevar - Se arrasco la cabeza como pensativo - Es muy.. formal. No es lo mio, al parecer sucedio lo mismo con mi abuelo. Soy tan cabezota como el.-Nelliel entendió las palabras emitidas por su amigo, sabía que él era así de rebelde y cabezota.

NELLIEL TU ODELSCHWACK:-Lo sé, sé cómo eres, quizás seas único por éso que te hace tan característico, y que..-no pudo continuar la frase, ya que las mejillas se tornaron de un ligero color sonrojado, un poco ocultos por su marca de la Estigma debajo de los ojos grandes pardo-grisáceos, se daba cuenta de algo extraño que sentía desde hace, quizás, muchos años. Ace su único amigo, y, sino el que más, el mejor consuelo que tenía por ahora.- .. bueno.. que. me cayeras tan bien cuando te conocí..- añadió. La suave y fresca brisa le tranquilizaba por dentro, aunque algo le decía que algo no marchaba bien.

-¿Crees que hicimos bien en venir aquí? Viniendo hasta aquí asumimos que podemos ser atacados por las indeseables maquinas denominadas Akuma. Corremos el riesgo de morir. Corres el riesgo de perder la vida.

Sintió la azabache mirada de Ace. Quizás aquéllo era lo que estaba sintiendo, de modo que alzó hacia mirar fijamente a los negros de su mejor amigo.

NELLIEL TU ODELSCHWACK:- Hicimos bien en venir, poseemos unos poderes únicos cada uno que no poseen la mayoría de los humanos civiles. Lo que hemos de hacer es cuidar uno al otro. Y nada nos pasará. - le dijo, acariciándole una mejilla dulcemente con una tierna y tranquila sonrisita, aunque mostrando el mismo rostro preocupado que él, con una de sus suaves manitas, igualmente preocupada que él- Si estamos amenazados por los Akuma y los Noé, ambos a órdenes del Conde Milenario, debemos luchar aunque no nos guste, para que las amas de los Akuma por fin descansen en paz. Esta guerra es inútil.

Las palabras de Nelliel como siempre le calmaban. Le encantaba estar con ella ya que siempre tenia la respuesta idonea para sus preguntas estupidas. Nelliel le puso la mano en la mejilla y el se la cojio y la apreto contra la sulla. Sus manos eran calidas y agradables, suponia que las sullas estarian de todas formas menos frias ya que por decirlo alguna manera el era de fuego.

-Tienes mucha razon. Siempre la tienes. Dare todo por protejerte, a ti y a todos los que esten en mi mano.

Recordo entonces la promesa que le hizo aquel dia cuando aun eran jovenes y sonrio mirandola, era igual que cuando era pequeña salvo por sus rasgos de adulta. Alargo su mano y le cojio un mechon de pelo.

-Te ha crecido mucho, no me habia dado cuenta hasta hoy.

Jugueteo con su mechon de pelo rizandolo en su dedo y entonces se fijo en su traje de exorcista. Realmente le quedaba muy bien, realzaba su gran silueta y ... un momento, ¿en que estaba pensando? Aquello era raro, nunca se le habia pasado por la cabeza pensar de aquel modo. Sintio entonces como sus mejillas podian haberse sonrrojado, sentia su cara ruborizada.

Escuchó las palabras emitidas por su amigo de la infancia, a quien dejó que acariciase el mechón de su cabello azulado-verdoso y lo rizaba entre sus dedos. Lo podía ver sonrojado y ella no podía evitar sonrojarse un poco más de lo que estaba.

--Te ha crecido mucho, no me habia dado cuenta hasta hoy.-Sonrió dulce y tranquila ante el halago que Ace hacía hacia su cabello y cómo miraba su uniforme. Entonces, en un arrebato, abrazó a su amigo, le hacía feliz y más tranquila tenerle a su lado. Algo le impulsaba a protegerle a él pese a la promesa de que, si ella estaba en peligro, él vendría a salvarla.

NELLIEL TU ODELSCHWACK:- Quizás te pueden hacer un uniforme a medida, como tú prefieras, ¿no crees, Ace? - Le preguntó entonces, sin querer separsrse de él.

Ace sintio una presion en su pecho, su querida amiga le estaba abrazando. Era una sensacion estraña pero muy agradable.
Cuando pudo reaccionar, la atrajo hacia si extrechandola entre sus fuertes brazos. Nelliel se veia mas baja que el y podia rodearla completamente con sus brazos, era todo una guerrera sin apartar su bella parte femenina. Con la mano derecha, pero aun abrazandola con la otra, le acaricio la cara pasando su dedo pulgar por su estigma. Seguia pensando que aquella marca era muy extraña y probablemente seria de lo unico de lo cual Ace desconociese de Nelliel.

-Puede que les mande que me hagan unos pantalones Exorcista, nada de camiseta. - Hizo una pausa. - Se me acaba d ocurrir algo terriblemente loco.

Le gustaba estar cerca de Ace, de sus musculosos brazos y fuerte protección. Sintió cómo los musculosos brazos de él la rodeaban a ella, abrazándola.
Pensó que era buena idea el pedir que al menos le hicieran unos pantalones Exorcistas.
Una racha de cálida y agradable brisa les acarició el rostro y meció sus cabellos, se sentía realmente bien con Ace, y el rubor se acentuó un poco al sentir que el moreno le palaba uno de sus pulgares por la marca fucsia que Nelliel poseía bajo los ojos

- Se me acaba de ocurrir algo terriblemente loco.

NELLIEL TU ODELSCHWACK:-¿Qué se te acaba de ocurrir, Ace?- preguntó ella mirándole a los ojos azabache y brillantes como piedras preciosas a su mejor amigo con los suyos pardo.grisáceos.

Se punso a pensarlo detenidamente, era algo extraño pero, no habia visto a ningun exorcista que lo llevase. Seria algo original.
La brisa empezaba a ser algo fresca y el cuerpo de Ace se erizaba involuntariamente, sentia cosquilleos en la nuca.
Notaba como su sombrero daba golpecitos en su espalda al ser movido por el aire, lo tenia sujeto con una cuerda al cuello para que no volase con el viento tan facilmente.
Se aparto un poco de Nelliel, no queria agobiarla mucho y serle molesto. Se froto el pelo y se enrojecio un poco al querer contarle lo que planeaba a su mejor amiga.

-Pues veras... - No supo como empezar - No se si a ti te gustara, pero pienso tatuarme el signo de la orden en esta espalda tan desnuda. - Al poco añadio - Desnuda porque no quiero que cubra. - Sonrio.

Miro entonces al arbol que estaba mas proximo a ellos e imagino a su hermano pequeño subido en el haciendo el gamberro de rama en rama, aquello ya habia pasado una vez y tuvo que curarse unas cuantas heridas a causa del viaje que hizo hasta el suelo desde una rama alta.
Volvio a mirarla.

-Decidido, buscare a alguien que pueda hacerme un buen tatuaje, no quiero que me hagan una chuminá campestre, ni tener que soportarla la vida tampoco.

Nelliel escuchó las palabras de su mejor amigo, creyendo que ésa era una buena opción, lo que ella asimismo aprobaba, con tal de que no dañara la salud del mismo. Cuando sintió que él se separaba un poco de ella para no sentirle agobiada ni nada por el estilo, ella le continuó mirando al rostro, a esos ojos azabache que tanto le gustaban, y se dio cuenta de que se acordaba de su hermano pequeño. Sonrió dulcemente mirándole a los ojos.

NELLIEL TU ODELSCHWACK:- Parece buena idea, si es tu estilo el no llevar camiseta ni gabardina- le comentó ella apreciando la decisión de su mejor amigo- Quizás podemos encargar el tatuaje de la Orden Negra a los Del Departamento Científico, aunque podrían dañarte la zona desnuda donde van a tatuar, por lo tanto, si quieres, puedo ir y estar contigo cuando te..- Nuevamente se ruborizó sin darse cuenta mientras el suave y agradable viento le mecía los largos cabellos y los pliegues del uniforme- tatúen.- finalizó, con la mirada baja ya que no quería que se notase el rubor de sus mejillas. Se veía que andaba muy preocupada por su mejor amigo.

A Nelliel le parecio muy buena idea y aquello contento a Ace. Que su amiga tambien apreciara sus ideas le era confortable y al darle la idea de que le tatuaran los Cientificos se ofrecio a estar presente. Era obvio que Nelliel era la que estaba nerviosa en vez de estarlo el, y no pudo evitar sonreirle agradecido.

-Lo agradeceria mucho. - Le vuelve a acariciar un mechon de pelo que pone por delante de los hombros de ella - Espero que no me toque el loco de Komui.. o presiento que lo voy a pasar muy mal. ¡Asi que agradecere tu apollo!

Mira hacia el edificio de la Orden, tan tenebroso como siempre...

-Nunca entendere esa extraña decoracion tetrica..

Se aparta el pelo que el viento, ahora algo mas fuerte, le habia puesto en la cara. El tiempo estaba empeorando y el cielo se enegrecia. Se abecinaba tormenta.
-

Nelliel sonrió aunque un poco preocupada, notó que el tiempo iba empeorando, pues el viento era un poco más fuerte y el cieo se estaba nublando.

NELLIEL TU ODELSCHWACK:- La verdad es que es un poco extraño. ¿Te parece bien que marchemos al edificio? Me temo que empezará a llover de un momento a otro.- comentó ella mirándole a los ojos a su mejor amigo